Un espeso cielo azul como el mar cubría los altos de Elwynn, mostrando en su interior a varios clérigos rondando alrededor de la Abadía de Villanorte a la vez rezaban agradeciendo a la luz por los días que han vivido, y les queda por vivir en éstos peligrosos tiempos que corren.
En el interior de la Abadía, varios jóvenes atendían atentamente las palabras de un experimentado paladín, detallándole éste el camino correcto hacia la luz, sus propósitos y consecuencias. Éstos jóvenes, tras largos años en el camino de la luz, al fin lograrían su destino, convertirse en auténticos paladines fieles a la luz, lucharían junto a ella, y caerían junto a ella si así lo quisiera el destino, estaban preparados.
Una vez finalizada su última instrucción, fueron bendecidos por los clérigos, y a continuación, el viejo paladín instructor prosiguió a darles sus nuevas armas, con las que atormentarían al infiel, y bendecirían al fiel durante el resto de sus días. Finalizado el acto, los cinco jóvenes orgullosos del propósito logrado, abandonaron la Abadía despidiéndose de las amistades entabladas en tal lugar, ahora, se enfrentarían al peligro del exterior, en la que sus vidas dependerían de ellos mismos, sin confiar en nada ni nadie, únicamente en la luz y en ellos mismos.
Uno a uno, los jóvenes comenzaron a dispersarse, cada uno tenia un diferente destino al que acudir, un lugar diferente al que prestar ayuda. A pesar de la valentía y optimismo de los jóvenes paladines, los sabios de la Abadía sabían que de los cinco jóvenes, tan solo uno llegaría a la mediana edad de los 40 años, el resto, terminaría dejando su vida en el olvido. No obstante, se depositaba cierta fe en uno de ellos, un muchacho con un terrible pasado, llamado “Mark”, también conocido como Marsk.
Tal muchacho, a la temprana edad de los 4 años sobrevivió a uno de los golpes mas duros que puede recibir cualquier mortal a lo largo de su vida, la pérdida de su madre y sus tres hermanos, y lo mas doloroso de ello fue el origen de esa perdida, su propio padre, “Valthen Rousbrinther”, ahora conocido como, Supvioca, el Umbrío. Tras asesinar a su propia familia brutalmente, éste engendro se aseguró de que ninguno quedara con vida, afortunadamente, el pequeño malherido, pudo arrastrarse a duras penas hacia el exterior de la casa dejando un leve camino de sangre a su paso, bajo el temor de que su propio padre, terminara descubriéndole, no fue así.
A lo largo de toda su vida, ha estado marcado por tales hechos, aún así, su esperanza y su fe le han ayudado a olvidar lo inolvidable, y ahora, su objetivo es el que muchos ansían encontrar tarde o temprano, la erradicación por completo del Umbrío; Una tarea que su propio hijo estaría dispuesto a llevarla a cabo, aún pereciendo en el intento…
Vie Mayo 14, 2010 3:12 pm